Descargo de la hija de un militar
"No soy de hacer este tipo de publicaciones pero he leído muchas cosas que lograron desbordarme de alguna u otra manera. Soy hija de un militar. De esos que eligieron la carrera con el corazón, así como muchos de nosotros a los 16 o 17 años nos encontramos en la búsqueda de lo que queremos hacer por el resto de nuestras vidas, o eso se supone. Sea lo que sea que elijas hacer, querés que lo respeten, que valoren tu trabajo y esfuerzo, porque más allá de todo siempre está el valor humano, las historias de vida y el valor personal que le da cada uno a lo que decidió ser.
Pero acá parece que se olvidan justamente de eso, del valor humano. Desde muy chica he tenido que soportar comentarios tales como "milicos torturadores" "los milicos están para matar" "los milicos lo único que hacen es tomar mate" o en muchos casos en los que únicamente se podría agradecer, he leído "los milicos están para eso".
Era una niña y ¡pucha!, qué fuerte era escuchar todo eso porque claro, mi papá es militar y yo sabía lo que era pasar nueve meses sin poder verlo, comunicándome con él por una especie de radio muy vieja que a veces no me dejaba ni escucharlo. Yo sabía que él junto con muchos otros estaban ayudando a llevar la paz a otras personas pero no sabía que quizá podía no volver a verlo.
Cuando él volvía, porque él pudo volver, veía en las fotos cada unas de las cosas que pudieron hacer para ayudar a quienes los estaban necesitando, la construcción de nuevas escuelas, un trabajo en equipo para que uno de los pueblos pudiera tener agua potable al alcance de la mano (cuando antes debían caminar kilómetros para poder conseguirla), colectas entre todos los compañeros para poder festejar el día del niño, algo que ni siquiera conocían allí, y así,muchas cosas más. Pero lo más importante y lo más lindo para mí, fue poder ver siempre la sonrisa de agradecimiento y de satisfacción de esa gente. Ahí entendía todo.
Pero esas mismas sonrisas nunca les fueron devueltas en su propio país, acá no importa todo eso, acá el simple hecho de ser militar, ya los condena. Cuando se habla de la delincuencia te dicen que hay que ver, hay que analizar el contexto, las oportunidades que tuvieron y que no hay que tener prejuicios; perfecto.
Pero a la hora de hablar de militares lo único de lo que te saben hablar es de la dictadura, así la mayoría no haya ni nacido en esa época, es lo que basta para continuar castigando. A unos los vamos a seguir atormentando por el pasado, no importa quien seas y si ni existías, pero a otros, bueno, hay que ver.
Me molesta tanto la doble moral.
Qué loco, hasta he escuchado que le tienen más miedo a los militares que a un delincuente. Parece el mundo del revés.
No pretendo absolutamente nada con esto, simplemente necesitaba hacer una especie de descargo, recordarle a muchas personas que detrás de cada militar hay una familia, que los comentarios duelen, que hay historias y sobretodo que son PERSONAS que aman lo que hacen, que es algo tan valioso como quien decide ser médico, abogado, cantante, pintor y podría seguir con muchas más.
Y hay que tener memoria sí, por supuesto, pero por el simple hecho de tener sentido de humanidad y no para que le sirva a algunos grupos para hacer política, utilizando el dolor de la gente, hablando desde el odio, y buscando constantemente dividir."
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