El padrón Jousten, ex sede del Parque Hotel, por las edificaciones y por su particular historia, presenta una importancia histórica y patrimonial a ser considerada. El predio, además, es lindero a la capilla de San Benito, actual monumento histórico. La zona, dónde comenzó el poblamiento del Real de San Carlos a partir de 1761, constituye por lo tanto, un punto urbano por demás sensible. Datos históricos más claros acerca del padrón se tienen a partir de la segunda mitad del siglo XIX. En ese momento Benjamin Dyer Manton, figura destacada durante la época, se instalaría en la zona.
La historia del ex Parque Hotel, Colonia
El estadounidense B. Manton, al comenzar el siglo XX, fue uno de los iniciadores del posterior auge y proyección turística que tendría la zona de el Real de San Carlos . En los años 1905 y 1906 realizó contactos con Buenos Aires para instalar un gran hotel, el “Hotel Uruguayo – Argentino”. Al conocerse esta iniciativa aumenta el valor de los terrenos, hasta 400 y 500 pesos la hectárea. También propició el desarrollo de varias quintas “Por la zona próxima al Real se sabe que fue el creador de algunas Quintas que todavía existen y que llevan los conocidos nombres de Quinta Yamandú, Olinda o Villa Juanita.”
El norteamericano Benjamin D. Manton, asimismo, participó en el negocio extractivo arenero (según trasciende de la documentación consultada y de la tradición oral). El mismo, que trajo el teléfono y la luz eléctrica a Colonia, fabricaba vinos en su granja “San Benito”, exportándolos a EE.UU (según informa la prensa en 1904). Las tierras en el Real de San Carlos las habría adquirido entre los años de 1860 y 1870. En 1875 consigue que la Junta le escriture la chacra N° 3 según los planos del agrimensor Quinke. Nombrado cónsul honorario de los EE.UU en 1869, estableció en su casa quinta la sede consular. En esas tierras desarrolló la vitivinicultura y hoy, sólo quedan vestigios en derrumbes incendiados y grafiteados de un tiempo, otro tiempo que hoy ya no está...
En los años 30 funcionaba el Parque Hotel de José M. Rovira, lindero a la capilla de San Benito. Según publicidad de la época, ofrecía: “Canchas para juegos atléticos, autos y caballos para paseos, radiotelefonía y orfeolas, salas de lectura, conversación y baile, servicio de bar a todas horas, luz eléctrica, agua caliente y fría.” Remarcando que: “El hotel tiene una alta torre desde cuyas alturas se descubren magníficas vistas.” En este hotel y en el Hotel Casino se alojó en sus visitas a Colonia la poeta suizo-argentina Alfonsina Storni. También pasaba sus estadías en el Real en la casa de su amiga Sofía Kusrrow (Fifi), la cual residía en el Real de San Carlos. Alfonsina redactó algunos de sus últimos poemas durante estas visitas...
Extractos parafraseados del libro
"Real de San Carlos" de Sebastián Rivero
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